Un día especial...(II parte)

Me quedé pensando...
No podía ser! él si estaba enojado!.
No entendía nada. Hojé las fotografías que tenía a la mano, pinturas y mas pinturas. Estaba nerviosa, ya iban como 3 veces que veía las mismas fotografías... No sabía que hacer.

-Te lo agradezco vivi-Dije tartamudenando, estaba nerviosa-Muchas gracias, aunque no se que le diré cuando venga.
-Pues todo lo que quieres decirle-Me dijo-Dile que no quieres que sigan enojados solo por la culpa de ella.
Viviana cuando decía "ella" se refería a la persona que hizo todo por separar nuestra amistad. No la culpo a "ella", piensé que jamás tuvo la culpa...
-¿Pero esque como le voy a hacer?-Dije.
-Pues no se ya verás que se va a arreglar todo...-y suiguió- ¿quieres que cuando el llegue yo me vaya y los deje solos?.
-!No!, jamás hagas eso porfavor!.
-Esta bien-me dijo viviana.

Llegó; se veía en la esquina de la otra calle. Estaba un poco nerviosa pero a la vez triste. Tal vez nunca me perdonaría. Pero era un primero y último momento para arregalr las cosas con él.

-!Mira allá está!-gritó viviana-!Mira allá está!.
Me hize como la que no había oido nada y le dí un codazo para que callara.
Dije en voz baja:
-Cállate viviana-El corazón empezó a latir cada vez más fuerte y volté a donde él estaba.
Cruzó la calle, mientras viviana gritaba:
-!Pásale amigo!.
-No viviana no es nuestra casa vamos al barandal para platicar allá-Dije.

Nos levantamos de la banca en la que estábamos, bajamos las escaleras y seguimos derecho por el camino hasta llegar al barndal. Lo abrí salí y dije:
-Hola.
Parecía como si nadie me hubiera escuchado. Venía con uno de sus amigos.
Despúes dijo con su voz grave:
-Mande, de que querías hablar.
Se me hizo un nudo en la garganta, pero aún así hablé:
-Quiero arreglar las cosas porque andas enojado conmigo.
Suspiré, me sentí más segura de mí misma.
-No estoy enojado-Dijo él.
-Si anda enojado, si anda enojado amigo-Dijo viviana, riéndose.
Él hizo un gesto de alegría pero no como el gesto que yo conocía hace tiempo.
-Esque si estas enojado-Dije yo y seguí-No te he hecho nada para que me dees de hablar, además yo no quiero que sigamos enojados.
-No estoy enojado-Dijo él. Tal vez un poco más enojado porque había cambiado su tono de voz.
Era lo único que decía, que él no estaba enojado.
-Si lo estas-Volví a decir yo.
-¿Porque dices que lo estoy?- Dijo. Gracias a Dios había cambiado de palabras.
-Porque le dijiste a "ella" que yo le había metido cosas de tí y eso no es cierto.
-No me acuerdo de eso-Dijo.
-¿Bueno te acuerdas de las conversaciones?-Le dije.
-No, ¿De cuáles?- Volvió a decir, pero era un hípocrita. Como no se iba a acordar.
-De las que me dijiste que lo bueno era que jamás me volverías a ver, ni a mí que soy la prima fastidiosa ni a "ella".
Tartamudeó. Claro, él sabía de lo que yo estaba hablando, pero aún así se hizo como si no supiera nada.
-No me acuerdo-Dijo.
-Está bien, ¿te aucerdas del MP del metroflog?- Le dije. Estaba enojada.
-¿Cuál?
-El que me dijiste que no les hablara a tus amigas.
-No no me acuerdo.

Volvió a decir; pero esta vez !ya no aguantaba! como no se iba a acordar!

-Bueno, entonces ¿no estás enojado?- Volví a decir.
-No, no estoy enojado-Dijo, esta vez noté que estaba demasiado enojado como para seguir hablando conmigo.
-Está bien, te dejo, espero y no estes enojado-Dije mientras abría la puerta del barandal.
-Me tengo que ir-Dijo-adios.
-Adios- Dije y suspiré.
Se fue, cruzó la calle y desapareció entre aquellos caminos y árboles que daban hasta la cancha.
Traté de divisarlo de nuevo, pero él ya no se encontraba.

Fuimos al jardín viviana y yo. Subí las escaleras un poco feliz.
-Gracias vivi-Le dije.
-Te dije que me lo agradecerías-Me dijo.
Le dí un pequeño abrazo y seguimos trabajando.

Ya en la noche, hablé a mi mamá para que viniera por mí.
Llegó después de unos 30 minutos.
Pensé en todo el camino a mi casa. No sabía que era lo que estaba pasando. Pero era un día feliz, un día especial, el cual nunca olvidaría.